Sistemas de Apuestas en el Bacará – Cómo Usarlos

La necesidad de apostar es algo intrínseco de la humanidad. Y con ello, viene la falsa ilusión de control que nos da. A las personas les gusta sentir que pueden ejercer sus habilidades sobre algo que se basa exclusivamente en la suerte. Por ejemplo: los juegos de azar como la ruleta y el baccarat. Con ambos juegos, es bastante obvio que tienes una probabilidad de 50/50 de obtener rojo / negro, par / impar, o jugador / banca en el caso del bacará.

No tienes que hacer un mayor esfuerzo solo elegir entre las cabezas o las colas, ¿verdad? Sin embargo, desde que apostamos en estos juegos, las personas han estado tratando de idear una estrategia que les ayude a predecir e influir en un resultado que es 100% aleatorio y basado en la suerte. Es decir, los sistemas de apuestas que utilizan muchos jugadores incluso hoy en día.

Tipos de Sistemas de Apuestas

En general, los sistemas de apuestas se pueden dividir en sistemas de progresión positiva y sistemas de progresión negativa. Con el primero, se supone que debes aumentar tu apuesta cuando ganas y disminuirla cuando pierdes, mientras que con el segundo es lo contrario: aumentar tu apuesta cuando estás perdiendo y disminuirla cuando estás ganando. Si esa lógica te parece un algo extraña, es porque lo es.

De hecho, no hay pruebas de que funcionen, sino todo lo contrario. Estos mitos de jugar, aumentar o disminuir tus apuestas en base a un posible resultado han sido desacreditados en numerosas ocasiones. Sin embargo, la gente los usa porque así es como funciona la psicología del juego y porque estos sistemas son realmente fáciles de aplicar. Echemos un vistazo a algunos de los más populares utilizados en el bacará.

Martingala

Uno de los sistemas de apuestas más antiguos es el de Martingala; se basa en un sistema de progresión negativa utilizado en juegos basados en el azar como la ruleta, el baccarat y los dados. En esencia, para poder aplicarlo, debes apostar la misma cantidad nuevamente después de ganar y doblar tu apuesta después de perder.

Por ejemplo, si apuestas $ 5 y ganas, deberás apostar $ 5 nuevamente. Sin embargo, si pierdes, tendrás que apostar $ 10. Si vuelves a perder, la apuesta deberá ser de $ 20 y así sucesivamente. La idea es que cuando eventualmente ganes, y en realidad cada vez que ganes, podrás recuperar $ 5 a pesar de tus pérdidas anteriores. Aquí hay un ejemplo. Si apostaste $ 5, pero después de cuatro derrotas consecutivas, logras ganar. Habrás conseguido $ 160, pero ya habrás perdido $ 155 en tus apuestas anteriores (los $ 5 + $ 10 + $ 20 + $ 40 + $ 80 de tu última apuesta ganadora).

Entonces, en teoría, nunca perderás, sino que mantendrás en tu apuesta inicial. Pero la realidad es otra. Imagina que apuestas $ 5 y tienes una racha de trece derrotas consecutivas, entonces tu próxima apuesta tendría que ser de $ 40,960. Supongamos que tienes esa cantidad de dinero, pero si vuelves a perder (lo que es más probable de lo que crees), tendrás que apostar hasta $ 81,920 y eso está muy por encima del límite de apuesta de la mayoría de las casas.

Lo que nos lleva al punto principal: cuando juegas con la Martingala, a la larga, te quedarás sin dinero o los límites de apuestas del casino te impedirán continuar usando esta estrategia, incluso si estás dispuesto a realizar apuestas ridículamente altas. Los sistemas como la Martingala podrían funcionar en sesiones de juego cortas con menos rondas de apuestas. Aunque el bácara online con su bajo margen de ventaja de la casa parece ser una buena opción para probar este sistema, no te recomendamos que lo intentes cuando juegas en línea, sobre todo en versiones como el Mini o Speed Baccarat.

Las rondas en línea son mucho más rápidas que las presentes en los casinos tradicionales, y las posibilidades de recuperar tus apuestas utilizando la Martingala son mayores si pasas menos tiempo jugando (aproximadamente una hora) antes de que llegues al máximo permitido en solo una hora, podrías jugar 120 rondas de baccarat.

Paroli

A diferencia del sistema Martingala, el Paroli es una progresión de apuestas positivas que tiene más de 400 años y fue desarrollado originalmente para un juego de cartas llamado Basset. El nombre del sistema se deriva de la palabra latina Par que significa «uno que es igual». Se puede usar para todo tipo de juegos de mesa y cartas que incluyen apuestas basadas en las probabilidades como la ruleta, el baccarat, los dados, el Sic Bo, el póquer Pai Gow e incluso el blackjack con algunas modificaciones. Al igual que con otras progresiones, no hay garantía de que te ayude a ser un ganador, pero su simplicidad lo ha hecho un método muy popular entre los jugadores.

Para utilizar este sistema, necesitas determinar una apuesta fija antes de empezar. La apuesta fija es cuánto planeas apostar al comienzo de cada progresión. Puede ser cualquier cantidad que desees, pero es una buena idea que no sea demasiado alta para que superes demasiado rápido tu presupuesto de apostador. Cerca del 2% del presupuesto que estableciste está bien. En pocas palabras, el sistema funciona así: las pérdidas siguen a las apuestas planas, es decir, no debes cambiar tu apuesta después de perder, y tienes que comenzar a duplicar la apuesta cuando ganas. Algunos jugadores solo las duplican durante tres victorias consecutivas, mientras que a otros les gusta apostar en muchas progresiones mientras están en una racha victoriosa.

El sistema de apuestas Paroli ofrece cierto potencial para obtener ganancias consistentes aunque pequeñas y, a diferencia de las progresiones negativas, la posibilidad de grandes pérdidas no es algo de lo que debas preocuparte. En teoría, si duplicas con éxito tu apuesta en tres victorias consecutivas, tu apuesta inicial se multiplicará siete veces. Sin embargo, realmente no hay garantía de que ganarás debido a lo impredecible de estos juegos. Ten en cuenta que si pasas por una racha de pérdidas, perderás mucho. Así de simple. Al igual que todos los demás sistemas de apuestas, el sistema Paroli no influye en la ventaja de la casa y se utiliza más bien como una forma de administrar tus fondos.

Labouchere

El sistema de apuestas Labouchere, también conocido como «Sistema de cancelación», «Tachado», «Labby», «Progresión estadounidense» o «Martingala dividida» es una progresión negativa que es muy popular y ampliamente utilizada por los jugadores a pesar de su complejidad. Al igual que el sistema de apuestas Martingala, el objetivo del Labouchere es ayudarte a recuperar pérdidas, pero en lugar de recuperar todas las pérdidas anteriores con una sola victoria, se supone que compensa las apuestas perdidas con múltiples ganancias menores en su lugar. Fue diseñado por Henry Labouchere, quien lo desarrolló para ser utilizado en la mesa de la ruleta, particularmente en las apuestas externas, incluso en las apuestas de color rojo / negro o impar / par. Sin embargo, se puede aplicar a otros juegos de probabilidades pares como el baccarat, el blackjack y las apuestas deportivas

El ciclo de la progresión comienza cuando el jugador escribe una secuencia de números. Para la primera apuesta, suma el primer y el último número. Si se trata de una apuesta ganadora, tacha los números de la secuencia y apuesta al primero y al último de los números restantes. Si pierdes, agrega otro número. El ciclo se completa cuando has tachado todos los números. Por ejemplo, si anotas 1 – 2 – 3 – 4 – 5, la primera apuesta sería de 6 (1 + 5). Si ganas, tachas el 1 y 5, y apuesta seis nuevamente (2 + 4). Si pierdes, agrega otro número. Estas bacara reglas se aplican después de cada apuesta. Tacha los números cuando ganes, agregue números cuando pierdas.

La idea principal de esta progresión es que no importa cuánto dure la secuencia, incluso si tienes más apuestas perdedoras que ganadoras, siempre obtendrás una ganancia igual al valor total de los primeros números que anotaste en tu secuencia. Esta progresión tiene la ventaja de que es flexible y te permite ajustar la secuencia inicial, por lo que tendrás más control sobre el riesgo y la recompensa. Si tu presupuesto te permite apostar a lo grande, puedes comenzar con una secuencia más larga y obtener un mayor beneficio si llegas al final de la cadena.

Sin embargo, siempre existe el riesgo de tener una larga racha de pérdidas, especialmente si juegas durante más tiempo, lo que te hará aumentar tus apuestas hasta que termines con tus fondos o te veas limitado por los límites de las apuestas establecidos por el casino. Ten en cuenta, que puedes evitar esto agregando ceros a la secuencia.

Fibonacci

El sistema Fibonacci es muy popular entre los jugadores de ruleta y también se puede aplicar perfectamente al baccarat o a cualquier otro juego con apuestas basadas en las probabilidades. Este un sistema de progresión negativa, pero debido a que su aumento de apuestas es menos agresivo, ofrece un enfoque más flexible. No es tan sencillo de aplicar, pero tampoco es demasiado complicado.

Este sistema se centra en usar una secuencia de números conocida como la “secuencia de Fibonacci” donde cada número es la suma de los dos anteriores. La secuencia es 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, 89, 144, 233, 377 y puede continuar hasta donde sea necesario. También puede comenzar con un cero, pero cuando se usa en sistemas de apuestas, siempre comienza con 1. El Fibonacci también es conocido como el sistema numérico de la naturaleza y juega un papel importante en las matemáticas y otras ciencias que estudian la naturaleza.

Cuando se trata de juegos de casino, este sistema se aplica en las apuestas externas de probabilidades en la ruleta y otros juegos como el baccarat, los dados y el blackjack. Cuando utilizas esta estrategia en la mesa de bacará, deberás comenzar apostando una unidad porque el primer número de la secuencia de Fibonacci es 1. Si pierdes, pasa al siguiente número de la secuencia, por lo que apuesta es una unidad nuevamente. Si vuelves a perder, la próxima apuesta será de dos unidades y así sucesivamente hasta que ganes. Cuando ganas, te mueves dos casillas, reduciendo el tamaño de la apuesta retrocediendo dos números.

Si ganas en la primera apuesta, simplemente comienza la progresión nuevamente, apostando una unidad. Una unidad representa la cantidad de dinero que decidas antes de comenzar el juego. Puede ser cualquier cantidad, pero es mejor si se mantiene entre el 1 o 2 por ciento del total que está dispuesto a perder.